CELEBRACIÓN DEL CORPUS CHRISTI
2020 EN SEVILLA
La fiesta grande del Corpus Christi en Sevilla se celebrará este año 2020 de forma descafeinada sin la característica ceremonia de los Seises bailando frente al Santísimo. Tampoco habrán procesiones ni la octava . La custodia de Juan de Arfe no saldrá este año, a cambio el arzobispo portará a pie un ostensorio.
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El cabildo apuesta por una celebración más sencilla y escueta pero sin restar devoción y fe, y reitera la importancia de respetar las medidas higiénicas y de seguridad entre los asistentes. Por este motivo Monseñor Ajenjo bendecirá a los feligreses desde la puerta de la Asunción .
Se celebrará una misa con un aforo reducido posiblemente igual al que se mantuvo el pasado jueves en honor a las víctimas de la pandemia. Se ha convocando la asistencia a la misa de las autoridades militares, civiles y universitarias, y representantes de colectivos esenciales durante el Covid-19 en reconocimiento a su labor.
Tradicionalmente es una de las fiestas religiosas más importantes de la capital hispalense, junto con otras ciudades de España como Toledo o Granada. Ese día todas las hermandades procesionan por el centro de la ciudad. Las imágenes de los santos sevillanos como la Inmaculada Concepción, San Fernando, las Santa Justa y Rufina, San Isidoro, San Leandro, Santa Ángela de la Cruz, la custodia con El Cuerpo de Cristo, la Santa Espina conforman el cortejo procesional. La procesión se mueve al toque incesante de las campanas de la Giralda. Mientras, ell baile y canto de los Seises se desarrolla dentro del altar mayor de la Catedral. La ciudad se engalana para este evento con balcones, fachadas y altares decorados. Muchos de los asistentes, admiran la procesión desde los balcones desde donde arrojan a la Custodia pétalos de flores, gesto de la devoción y adoración.
Es una fiesta considerada de Interés Nacional por su carácter pintoresco y su larga historia ya que se remonta a la Edad Media. Desde el 1400, la ciudad establece la tradición de adornar balcones y fachadas y poner escaparates tras el discurrir de la procesión. Hoy en día sigue vigente dicha tradición pero montando escaparates de estilo barroco.